EL MUNDO DE AZCÁRATE

A unos 28 km al norte de Vladimir se encuentra Suzdal, un pequeño pueblo que integra el llamado “Anillo de Oro” que rodea a Moscú con algunos de los más destacados tesoros artísticos nacionales.

A partir del siglo XIII, durante la Edad Media rusa, Suzdal se convirtió en capital de un principado independiente, pero con el tiempo se fue transformando en un importante centro religioso. Hacia el siglo XIII ya contaba con unas treinta iglesias y conventos, muy cercanas unas de otros.

La ciudad rusa de Suzdal también posee su kremlin o fortaleza, donde se conserva lo mas antiguo de la arquitectura del lugar, la hermosa Catedral de la Natividad de la Madre de Dios que data del siglo XIII. En este atractivo religioso son muy características sus cinco cúpulas azules decoradas con estrellas de oro, destacando sobre el resto de los otros palacios y edificios del Kremlin. El ingreso a la Catedral es a través de una magnífica puerta dorada del mismo siglo, realizada en bronce y oro con técnicas del damasquinado. Por lo tanto, no es extraño encontrar a parejas rusas casarse aquí o que familias enteras festejen cualquier tipo de celebración en este bello lugar.

En Suzdal destacan tres monasterios principales; en el centro de la ciudad el Monasterio de la Deposición del Manto, fuera del casco histórico el Monasterio de San Eufemio Redentor (cuya entrada cuesta 150 rublos) y el convento de monjas de María Protectora, y que actualmente sigue prestando sus servicios.

El mas grande de estos monasterios es el Monasterio de San Eufemio Redentor que data del año 1.352, albergando numerosos edificios religiosos de los siglos XVI y XVII, una amplia colección de libros antiguos rusos y el túmulo del príncipe Dmitri Pozharski, héroe del levantamiento ruso de 1612 contra la dominación polaca. Entre los años 1.764 y 1.950 también fue utilizado como cárcel para disidentes religiosos y políticos, y durante la Segunda Guerra Mundial, como campo de internamiento del Ejército Rojo.

El patrimonio arquitectónico que protege el kremlin de Suzdal es Patrimonio de la Humanidad e integran lo que se llama “Monumentos Blancos de Vladímir y Suzdal”, declarado así por la UNESCO en 1992.

Por su importante patrimonio histórico, donde el turismo puede apreciar la antigua arquitectura rusa, con coloridas casitas de madera junto a molinos y graneros como se puede ver en el Museo de Arquitectura de Madera (60 rublos), iglesias, monasterios y demás, Suzdal constituye un importante destino turístico al que se llega a través de una excursión desde Moscú.

Aunque no es fácil llegar hasta aquí. Desde Moscú hay que coger un Westline autobús detrás de la estación Kurskaya, cuyas salidas diarias son 8:12, 14:17 y 18:43, tarda unas 3 horas y media el trayecto.

Para finalizar, me quedo con uno de los lugares más curiosos de Suzdal, su mercado local en la Plaza Central y donde por unos pocos rublos, el turista puede comprar las famosas Matrushkas, gorros de piel, casacas, insignias soviéticas, hortalizas, frutas o Vodka.

Suzdal es un lugar imprescindible en el Anillo de oro, después de San Petersburgo y Moscú, la ciudad que más encanto ofrece.