EL MUNDO DE AZCÁRATE

Bajo condiciones normales, ahora tendría que estar de viaje de Semana Santa en algún lugar perdido del Cáucaso pero tocar estar aíslado y recogido en casa.
En cambio voy a hablar de música, de un album muy reciente, tanto que salió hace 1 semana. Como bien dice The Weeknd "Let the music heal us all during these dark times.” Pues eso, que nos cure las heridas en estos tiempos tan jodidos...

Un disco que trata la soledad como remedio para combatir el miedo y la preocupación, un poco sadomasoquistas, tendencioso, arrogante, pasivo e incluso muy provocativo, como siempre.

“I don’t know if I can be alone again/I don’t know if I can sleep alone again,” canta en el 1er track del album “Alone Again,” en “Too Late,” se lamenta por ser un niño inconformista y caprichoso najo una melodía melancólica y triste sugiriendo que se encuentra en una prisión. Destaco “Hardest to Love,”  la cual habla de su inspiración por los villanos de las pelis, especialmente el Joker . 

“Heartless.” es otro de sus mejores temas, mostrándose arrogante y atrevido, dice que no se arrepiente de sus errores.  Musicalmente hablando, este album está a la altura de su obra anterior "Starboy" (2016) 

“Blinding Lights,” es uno de mejor Weeknd, al de los comienzos y también quiero destacar "Repeat after Me" con Kevin Parker de Tame Impala y Daniel Lopatin (a.k.a. Oneohtrix Point Never) con unos teclados profundos y melodía sesgada.

"After Hours" realmente es una invitación informal a una fiesta de despedida, bucólica más bien. “I thought I’d be a better man, but I lied to you and me,” dice en “Faith,” dejando claro que es uno de los mejores cantantes de su generación con esa referencia a un pasado de drogas en Toronto, “Snowchild” también se convierte en uno de los mejores tracks del album. Todas las pistas del album muestran la contradicción de la música de The Weekend, un gran somnífero para un momento tan agrio como el actual.