EL MUNDO DE AZCÁRATE

Desde The Heist, su exitoso LP de 2012 con Ryan Lewis, Macklemore ha sido realmente consciente de que es un pez gordo en la música Indie. Sus detractores, dicen de él que no es rap lo que hace y los poperos que no es suficientemente bueno para el pop (qué dura es la vida). Macklemore que se hizo famoso con temazos comerciales como  "Can't Hold Us" y "Thrift Shop" emerge con un nuevo álbum, Ben, en donde se muestra como un rapero clandestino convertido en estrella del pop internacional que ahora está más preocupado por la opinión de su esposa e hijos que por cualquier crítico.
Sin pensar en su discografía anterior, Ben tiene dos estéticas paralelas: canciones pop buenísmas pero no deja de lado su esencia underground con temas como el de "heroes" con DJ Premier. Me parece soberbio el equilibrio entre "Maniac" con la colaboración de Ed Sheeran con los gruñidos de Macklemore en "Grime", un número simplificado con trompetas funky y un bajo imponente. "Grime" se encuentra justo en medio de una serie de tres canciones que comienza con la ya mencionada  "Heroes" de Premier y termina con "I Need", una parodia sarcástica de los narcisistas que prosperan en nuestra cultura de consumo conspicuo. Estos temas muestran la mejor versión rapera del artista. Atrapado entre su pop de "vivir mi mejor vida" y sus reflexiones sobre la crisis de la mediana edad, la secuencia es desconcertante. Entonces, ¿Macklemore es una estrella del pop o un rapero? Los dos no son mutuamente excluyentes, pero se sienten claramente separados dentro de su catálogo. Por momentos, Ben suena como el trabajo de tres artistas diferentes y esto da mucho dinamismo a su album.

Hay algunas melodías pegadizas "No Bad Days" y "1984", y es que si por algo Macklemore es bueno es por el mimetismo. Posee una habilidad innata para emular flows de otros raperos. Creció como un niño blanco obsesionado con el hip-hop, cautivado por las historias de barrio de Nueva York y Los Ángeles, idolatrando a Biggie y 2PAC. Si Eminem permitió que los niños blancos se imaginaran a sí mismos en el escenario rapeando como sus ídolos, Macklemore los representa en el escenario: niños blancos que aman el rap y les dijeron toda su vida que su versión de la música negra no es auténtica. 
Es por eso que su música puede sonar un tanto cursi a mitad de camino entre el pop comercial y el rap, pero hoy en día..¿A quién le interesa eso?