EL MUNDO DE AZCÁRATE

La casa de papel, ¿Quién no la conoce a estas altuars? Para los pocos que quedan sin saber nada de ella, se trata de una serie española que se ha convertido en una de las mayores ficciones sobre atracos jamás vista. La serie, que cuenta con 41 episodios divididos en cinco temporadas, trata sobre el espectacular asalto, por parte de una banda de delincuentes, de la Fábrica Nacional de la Moneda y Timbre, en las dos primeras entregas, y del Banco de España, en la tercera, cuarta y quinta. La combinación de los géneros de acción, intriga y thriller junto a su atractivo argumento y el peculiar carácter de sus personajes la convierten en la serie española más exitosa de todos los tiempos.

La casa de papel parte de una idea original poco habitual en una serie de televisión: una historia de buenos y malos en la que es más fácil empatizar con los delincuentes que con la autoridad.

La ficción se estrena en un momento en el que impera la crisis económica y la corrupción política. Una realidad donde los gobiernos son inestables, y en los que el pueblo es incapaz de confiar. Los bancos han especulado con el dinero de sus clientes, los mismos que los han sacado de la ruina. El contexto sociopolítico real hace que el espectador empatice con los asaltantes. El pueblo también aparece representado por los protestantes que se agrupan a las puertas del edificio de la Casa de la Moneda para apoyar la causa de El Profesor y su equipo.

En la tercera temporada, la inspectora Murillo cambia de bando. Un hecho que podría parecer inasumible ya que Raquel representa a la “autoridad” . Esto consigue reforzar la idea de que los que se supone que son “los buenos” en realidad están en el bando de los atracadores. Ellos representan a "la resistencia" y nosotros, como espectadores, también queremos formar parte de ella.

La serie presenta dos líneas temporales bien diferenciadas: el presente y el pasado. En el presente, conocemos la ejecución del atraco; en el pasado, vemos la planificación que tuvo el asalto y conocemos el background de los personajes. Uno de los grandes logros de esta serie radica en el buen manejo de la tensión. Esto se consigue gracias al uso de flashbacks. Mientras que como espectadores queremos conocer todo lo que se esconde detrás del pasado de cada personaje, los creadores nos ofrecen pequeñas “pinceladas” de cada uno de ellos en distintos episodios. Por otro lado, el tiempo condiciona la estructura de los episodios. Esto se consigue gracias a un montaje en el que se intercalan dos tiempos, pasado y presente, para facilitar el suspense.

Una de las características primordiales de La casa de papel es que su historia está planteada como una cuenta regresiva. Se trata de un atraco que hay que resolver en el menor tiempo posible y que da pie a situaciones frenéticas. No me convence mucho que digamos el final ni tampoco la resolución de diferentes tramas, aunque si coincido con la muerte de Tokio y Gandia, no puede ser que en un atraco con los GEO y militares de por medio, haya múltiples tiroteos y nadie fallezca.
Sin duda, hay que destacar uno de los temas que se ha vuelto más viral gracias a su inclusión en la serie, Bella ciao, himno que fue adoptado por el movimiento de la resistencia partisana en Italia. La canción supone también un símbolo de resistencia para la banda de atracadores pero, sin duda, está íntimamente relacionada con el fondo de los personajes de Sergio Marquina, El Profesor, y su hermano Berlín.